Horacio Valdés

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03 mayo 2021

Sin embargo, la pandemia ha impactado de manera desigual las empresas de comercio electrónico, invirtiendo, por ejemplo, los beneficios registrados por las que ofrecen servicios de transporte privado y actúan en el sector de viajes.

Las restricciones de circulación introducidas en varios países para luchar contra la pandemia del COVID-19 han provocado un aumento del comercio electrónico, cuya parte de las ventas minoristas pasó del 16% al 19% en 2020, según estimaciones de la UNCTAD publicadas en un informe el 3 de mayo.

El informe fue presentado por la UNCTAD durante una reunión de dos días sobre cómo medir el comercio electrónico y la economía digital.

Según el informe, las ventas minoristas en línea crecieron de forma notable en varios países, de los cuales la República de Corea registró el mayor porcentaje en 2020 (25,9%) en 2020. Su parte en 2019 fue de 20,8% (Cuadro 1).

Entretanto, las ventas mundiales de comercio electrónico alcanzaron los 26,7 billones de dólares a nivel global en 2019, un aumento del 4% con respecto a 2018, según las últimas estimaciones disponibles. La cifra incluye las ventas de empresa a empresa (B2B) y de empresa a consumidor (B2C) y equivale al 30% del producto interior bruto (PIB) mundial de 2019.

«Estas estadísticas muestran la creciente importancia de las actividades en línea. También señalan la necesidad de que los países, especialmente los que están en vías de desarrollo, dispongan de esa información mientras reconstruyen sus economías tras la pandemia del COVID-19», dijo Shamika Sirimanne, directora de tecnología y logística de la UNCTAD.

Impacto desigual

Según el informe de la UNCTAD, la pandemia del COVID-19 ha dado lugar a resultados desiguales para las principales empresas de comercio electrónico B2C.

Los datos de las 13 principales empresas de comercio electrónico, 11 de las cuales son de China y Estados Unidos, muestran un notable cambio de suerte para las empresas de plataformas que ofrecen servicios turísticos y de transporte privado (Cuadro 2).

Todas registraron fuertes reducciones en el valor bruto de mercancías (VBM) y, por lo tanto, han caído en las clasificaciones del sector.

Por ejemplo, Expedia cayó del quinto lugar en 2019 al undécimo en 2020, mientras que Booking Holdings pasó del sexto al duodécimo y Airbnb, que lanzó su oferta pública inicial en 2020, del undécimo al decimotercero.

A pesar de la reducción del VBM de algunas grandes empresas, el VBM total de las 13 principales empresas de comercio electrónico B2C aumentó un 20,5% en 2020, lo que representa un crecimiento superior al de 2019 (17,9%). Hubo ganancias particularmente grandes para las empresas de Shopify (hasta el 95,6%) y Walmart (72,4%). En total, el GMV B2C de las 13 principales empresas se situó en 2,9 billones de dólares en 2020.

Las ventas entre empresas dominan el comercio electrónico

El informe estima en 21,8 billones de dólares el valor del comercio electrónico mundial B2B en 2019, lo que representa el 82% de todo el comercio electrónico, incluyendo tanto las ventas a través de plataformas de mercado en línea como las transacciones de intercambio electrónico de datos (EDI).

Estados Unidos siguió dominando el mercado global del comercio electrónico, seguido de Japón y China (Cuadro 3).

Las ventas de comercio electrónico B2C se estimaron en 4,9 billones de dólares en 2019, un 11% más que en 2018. Los tres primeros países por ventas de comercio electrónico B2C siguieron siendo China, Estados Unidos y el Reino Unido.

El comercio electrónico B2C transfronterizo se situó en unos 440 mil millones de dólares en 2019, lo que supone un aumento del 9% respecto a 2018. El informe de la UNCTAD señala que la proporción de consumidores que realizan compras transfronterizas en línea aumentó del 20% en 2017 al 25% en 2019.

Resultados deficientes en materia de inclusión digital

A pesar de las grandes fortunas de las empresas de comercio electrónico, un índice publicado por la World Benchmarking Alliance en diciembre del año pasado las calificó mal en materia de inclusión digital.

El índice evaluó a 100 empresas digitales, entre ellas 14 de comercio electrónico, en función de su contribución al acceso a las tecnologías digitales, a la creación de competencias digitales, a la mejora de la confianza y al fomento de la innovación.

Las empresas de comercio electrónico obtuvieron resultados inferiores a los de las empresas de otros sectores digitales, como el hardware o los servicios de telecomunicaciones.

Por ejemplo, la empresa de comercio electrónico mejor clasificada fue eBay, que se situó en el puesto 49. En general, las empresas de comercio electrónico obtuvieron una puntuación de sólo 20 de los 100 posibles.

Según el informe de la UNCTAD, uno de los principales factores de los malos resultados será el hecho de que las empresas de comercio electrónico sean relativamente jóvenes. La mayor parte fueron fundadas en las dos últimas décadas.

«Estas empresas se han dedicado más a la satisfacción de sus accionistas que al compromiso con un grupo amplio de partes interesadas y a la elaboración de métricas sobre sus resultados medioambientales, sociales y de gobernanza», dice el informe.

No obstante, hay algunos puntos positivos. Por ejemplo, varias empresas de comercio electrónico ofrecen formación gratuita a empresarios sobre la venta en línea. En algunos casos son dirigidas específicamente a grupos vulnerables, como personas con discapacidades o minorías étnicas.